Este miércoles, integrantes de la Sección 22 de la Coordinación Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) comenzaron un paro laboral de 72 horas en la Ciudad de México, lo que ha tenido un impacto directo en la educación de más de 800 mil estudiantes en Oaxaca. La suspensión de clases afecta a más de 11 mil escuelas en el estado, dejando a miles de alumnos sin actividades educativas entre el 19 y el 21 de marzo. La protesta forma parte de una movilización nacional que exige la abrogación de la Ley del ISSSTE de 2007 y la cancelación de la reforma propuesta para 2025.
A pesar de que la presidenta Claudia Sheinbaum cedió ante las demandas del magisterio, retirando la propuesta de reforma al ISSSTE, la CNTE ha decidido continuar con el paro, argumentando que la derogación de la reforma de 2007 y el restablecimiento del sistema de pensiones anterior siguen siendo demandas prioritarias. En la Ciudad de México, los maestros han instalado un plantón en el Zócalo capitalino, donde han anunciado que se mantendrán movilizados durante los tres días de paro. Yenny Pérez, secretaria general de la Sección 22, expresó que los docentes tienen razones justificadas para llevar a cabo esta acción, pues consideran que las reformas afectan de manera directa sus derechos y condiciones laborales.
Mientras tanto, las autoridades del magisterio aseguran estar dispuestas a continuar el diálogo con el gobierno federal para resolver sus demandas. Sin embargo, han insistido en la eliminación del pago de pensiones a través de las Unidades de Medida y Actualización (UMA), así como el regreso al sistema de pensiones que existía antes de la reforma de 2007. La situación sigue generando movilizaciones y alteraciones en diversas actividades en la Ciudad de México y otras regiones del país.