Jenny Aracely Pérez Martínez, secretaria general de la Sección 22 ha anunciado un paro indefinido, con el respaldo del 80% de la Sección 22 a nivel estatal y un 20% a nivel nacional. Este anuncio se produce tras mesas de diálogo en Palacio Nacional sobre demandas pendientes con el gobierno anterior, relacionadas con temas administrativos en los niveles educativos, como el adeudo de horas en secundarias generales y técnicas, necesidades en las escuelas y la falta de maestros en escuelas, entre otras.
Aunque el gobierno se ha comprometido a abordar estas demandas, la falta de avances ha generado la decisión de iniciar el paro el 15 de mayo, manteniendo el diálogo con la CNTE, pero con la advertencia de recurrir a un plan de acción si no hay respuesta satisfactoria.
Entre las demandas del magisterio nacional se incluyen la regularización del proceso para docentes con años de servicio, jubilaciones dignas en salarios mínimos y un incremento salarial acorde al trabajo desempeñado en las comunidades.
La CNTE considera estas demandas como justas y ha expresado su compromiso de seguir luchando por ellas, manteniendo una postura de diálogo. Sin embargo, ante la falta de avances concretos, se ha decidido implementar acciones más contundentes para hacer valer sus exigencias.