Desde el 10 de enero de 2025, el programa «Sí al desarme, sí a la paz» ha recolectado mil 297 armas de fuego en varias entidades del país, como parte de una estrategia para disminuir la violencia y prevenir accidentes domésticos. Según datos oficiales, se han recibido 875 armas cortas, 302 armas largas, 120 granadas, 55 mil 111 cartuchos, mil 223 cargadores, 245 estopines y dos cartuchos con dinamita. Este esfuerzo permite a la ciudadanía entregar armamento de forma voluntaria y anónima a cambio de dinero en efectivo, con un enfoque especial en proteger a niñas, niños y jóvenes.
La iniciativa, liderada por el gobierno federal, cuenta con la colaboración activa de la Iglesia Católica, que ha facilitado espacios como los atrios de catedrales para los módulos de canje. La semana pasada, en la Catedral de Celaya, Guanajuato, se recibieron tres armas de uso exclusivo del ejército, incluyendo dos rifles AR-15 y un AK-47. De manera similar, en la Catedral de Villahermosa, Tabasco, también se llevaron a cabo acciones de desarme. Además, se han intercambiado 3 mil 172 juguetes bélicos por didácticos, reforzando el mensaje de paz desde la infancia.
La campaña ha llegado a Ciudad de México, Guerrero, Chiapas, Chihuahua, Guanajuato y Tabasco, mostrando resultados significativos gracias al apoyo eclesiástico y la respuesta ciudadana. Las autoridades destacan que esta alianza busca reducir la circulación de armas, aunque el reto persiste ante la presencia de artefactos de alto calibre en manos de civiles.