El director del Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado de Oaxaca (SOAPAO), Omar Pérez Benítez, informó que el robo de alcantarillas, tapas y rejas pluviales es un problema constante en la capital del estado.
Este delito se comete con el fin de vender el material, generalmente hierro o acero, en el mercado informal.
Aunque no se cuenta con un censo preciso debido a la dificultad de monitorear toda la ciudad, en lo que va del año se han presentado al menos 20 denuncias formales por el robo de estos bienes.
«No tenemos ojos en toda la ciudad para contabilizar todas las tapas robadas», admitió el funcionario.
Cada tapa robada representa un costo significativo para la dependencia, ya que reemplazar una puede costar entre tres y cinco mil pesos, dependiendo del material. Además, el impacto va más allá de lo económico, pues pone en riesgo la seguridad de peatones y automovilistas que transitan por las zonas afectadas.
Pérez Benítez exhortó a la ciudadanía a reportar estos casos al número 951 501 5930 para que el SOAPAO pueda proceder con las denuncias correspondientes y realizar las reposiciones necesarias.
Como medida preventiva, la dependencia está considerando el uso de tapas de concreto en lugar de las metálicas, con el objetivo de minimizar el robo de estos elementos esenciales para el sistema de alcantarillado.