El presidente del Consejo de Administración de Autotransportes Istmeños S. A de C. V., Víctor Hugo Ramos, ha afirmado que los operadores de autobuses que cubren la ruta Juchitán–Salina Cruz–Huatulco tienen instrucciones claras: no prestar servicio a migrantes, según lo recoge una nota del periódico Noticias publicada este día.
Ramos agregó que la decisión se tomó después de que se reportara un ataque a balazos contra un autobús de la línea Istmeños en la carretera Transístmica, mientras se dirigía de Juchitán al puerto de Salina Cruz.
Desde el cierre del Centro de Movilidad Migratoria (CMM), las unidades de transporte no llevan migrantes a ningún destino de la ruta ni a puntos intermedios. Los operadores recibieron un oficio hace meses, prohibiéndoles subir a ciudadanos extranjeros cuya estancia en México sea ilegal. El incumplimiento de esta disposición resultará en su baja inmediata.
La orden proviene de las instancias reguladoras del transporte, incluyendo la Secretaría de Comunicaciones, Infraestructura y Transporte (SCIT) y la Guardia Nacional (GN). Aquellos que sean sorprendidos transportando migrantes indocumentados enfrentarán consecuencias legales.
La empresa de autotransportes enfatiza que su negocio se centra en el transporte de pasajeros locales: obreros, estudiantes y comerciantes. Evitar problemas legales es su prioridad, por lo que no suben migrantes.