Carolina Espina
Según documentos de organizaciones internacionales, México sigue colocado como uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, ante el número de comunicadores muertos en los últimos años. El 2023 fue uno de los más sangriento para los medios de comunicación.
De acuerdo a ARTICLE 19, el año pasado se registraron 561 agresiones contra la prensa, lo que significa que, en el país, en promedio, se agrede cada 16 horas a una persona periodista o medio de comunicación en el marco del ejercicio de su labor.
No obstante, en cuanto al número de casos, las agresiones documentadas presentaron una reducción del 19.40% con respecto al año 2022, el cual se mantiene como el año más violento para la prensa en registros de la organización. Sin embargo, el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, es comparativo al de Felipe Calderón por el número de agresiones a periodistas.
En cuanto a la tipología de violencia que vivieron comunicadores, se encuentran los mismos patrones que se han reportado en los últimos años. Las tres categorías de agresiones más documentadas en el 2023 fueron: intimidaciones y hostigamientos; el uso ilegítimo del poder público, principalmente a través de la estigmatización y el acoso judicial; así como las amenazas tanto en la esfera física como digital.
Las cifras de estas tres categorías de agresiones representan el 58.82% del total de hechos violentos que fueron registrados este año. La violencia contra la prensa tiene un origen diverso, desde funcionarios públicos y partidos políticos, pasando por particulares hasta integrantes de grupos delictivos. Sin embargo, el Estado mexicano sigue siendo el principal agresor de la prensa.
ARTICLE 19 establece que la violencia contra la prensa continúa siendo una constante en todo el territorio nacional, pues 29 de las 32 entidades federativas documentaron agresiones contra la prensa en 2023. Sólo los estados de Hidalgo, Querétaro y Zacatecas no documentaron alguna agresión. Por el contrario, los cinco estados de la república con más agresiones fueron Ciudad de México, con 115 agresiones, Guerrero con 48, Puebla con 39 casos, Guanajuato con 38 casos y Veracruz con 36.
“El 2024 se perfila como un año particularmente difícil para la labor periodística. En los procesos electorales se materializan grandes tensiones políticas en las cuales periodistas y medios de comunicación se encuentran vulnerables. Ejemplo de esto es que, en el año 2018, prácticamente dos de cada cinco agresiones contra periodistas, ocurrieron en el marco de su cobertura electoral”.