El arzobispo de Antequera-Oaxaca, Pedro Vázquez Villalobos, encabezó la celebración del Día de la Samaritana, festividad que cada cuarto viernes de Cuaresma reúne a fieles y ciudadanos en torno al simbolismo del agua compartida. En su mensaje, hizo un llamado a la reconciliación entre comunidades para evitar enfrentamientos como los ocurridos recientemente en el estado.
«Necesitamos que nuestros pueblos se reconcilien para que ya no haya pugnas, para que ya no haya muertes», expresó Vázquez Villalobos ante los asistentes. Señaló que el pasaje bíblico de Jesús con la samaritana debe inspirar a la búsqueda de la paz mediante el amor y el servicio al prójimo.
El Día de la Samaritana es una tradición oaxaqueña en la que templos, mercados y plazas ofrecen gratuitamente aguas frescas de diversos sabores, recordando el gesto de hospitalidad del evangelio. En este contexto, el arzobispo instó a los fieles a ser «fuente de agua viva» para los demás y a compartir valores como la generosidad y el respeto.
Finalizó su intervención con un mensaje de esperanza y bendición para los participantes, resaltando la importancia de los encuentros comunitarios como espacios de unidad y armonía.