Lizbeth Victoria Huerta, ex presidenta municipal de Asunción Nochixtlán, Oaxaca, fue liberada y absuelta de las acusaciones por la desaparición forzada de la activista Claudia Uruchurtu Cruz, tras pasar casi cuatro años en prisión preventiva.
Claudia Uruchurtu fue vista por última vez el 26 de marzo de 2021, luego de participar en una manifestación en contra de la administración municipal encabezada por Victoria Huerta. Testimonios indicaron que la activista habría sido detenida por personas relacionadas con la entonces alcaldesa, lo que llevó a la detención de Lizbeth Victoria y cuatro presuntos cómplices en mayo de ese año.
En 2023, la jueza María Teresa Quevedo determinó reclasificar el delito de desaparición forzada a obstrucción de la justicia. Esta decisión redujo la sentencia a cuatro años y dos meses de prisión, un hecho que causó indignación entre los familiares de la activista, quienes lo consideraron un reflejo de impunidad.
Posteriormente, la Sala de Justicia Indígena y la Quinta Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Oaxaca resolvieron una nueva reducción de la pena a tres años y siete meses, lo que permitió la liberación de Victoria Huerta. Además, la ex presidenta fue absuelta, al no encontrar pruebas suficientes para confirmar su responsabilidad en los hechos.
Claudia Uruchurtu había denunciado desde años antes irregularidades en el gobierno municipal de Nochixtlán, entre ellas nepotismo y presuntos malos manejos, lo que tensó su relación con las autoridades locales. Su desaparición ocurrió después de una protesta pacífica contra estas mismas prácticas.
Elizabeth Uruchurtu Cruz, hermana de Claudia, calificó la liberación y absolución como una «burla al sistema de justicia» y aseguró que el caso evidenció graves deficiencias en el proceso. “Hubo recesos y omisiones que favorecieron a los acusados, y la reposición del proceso en 2021 marcó el inicio de la impunidad”, afirmó.
La familia de Claudia Uruchurtu, junto con organizaciones civiles, continúa exigiendo justicia y una investigación imparcial que esclarezca los hechos. A pesar de la absolución de Lizbeth Victoria Huerta, persiste la pregunta sobre el paradero de Claudia y la demanda de sancionar a los responsables.