La noche del 11 de marzo, la Fiscalía General de la República (FGR) exoneró a Diidxazá, una joven rapera y tatuadora originaria de Juchitán, Oaxaca, quien fue liberada después de 7 días de privación de libertad. Diidxazá, de 21 años, había sido detenida el pasado 4 de marzo junto con otras personas en un retén de la carretera que conecta Ciudad Ixtepec y Juchitán.
Según los reportes, Diidxazá desconocía que los ocupantes portaban un arma de fuego. Durante una revisión en el retén, las autoridades encontraron el arma en el vehículo, lo que derivó en la detención de los ocupantes, incluida la joven artista.
A pesar de su arresto, Diidxazá defendió su inocencia en todo momento, asegurando que no estaba al tanto del arma. Fue trasladada primero a las instalaciones de la FGR en Matías Romero y luego llevada a la ciudad de Oaxaca, donde permaneció detenida.
Durante los días que estuvo privada de su libertad, la comunidad artística, familiares, amigos y diversas organizaciones sociales mostraron un fuerte respaldo a la joven. Se realizaron marchas, manifestaciones y denuncias en redes sociales exigiendo su liberación, mientras que cartas de apoyo fueron enviadas a las autoridades, subrayando la falta de pruebas en su contra.