Oaxaca se posiciona como uno de los estados con mayor consumo de refrescos en México, país que lidera a nivel mundial en la ingesta de estas bebidas. Según datos de la Universidad de Yale, el mexicano promedio consume 163 litros de refresco al año, superando en un 40 por ciento a Estados Unidos, que registra 118 litros por persona.
El Instituto Nacional de Salud Pública señala que siete de cada diez niños en comunidades rurales mexicanas acompañan su desayuno con refresco. Entre 1999 y 2006, el consumo de bebidas azucaradas en adultos mexicanos se triplicó, incrementando en un 15 por ciento la propensión a la obesidad en quienes las consumen ocasionalmente.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) destaca que Matías Romero Avendaño, en Oaxaca, es el segundo municipio del país con mayor porcentaje de población mayor de 20 años diagnosticada con diabetes.
En 2020, Oaxaca prohibió la venta de «comida chatarra» a menores mediante la Ley de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, debido a que se estimaba que cinco mil 432 niños menores de 10 años padecían obesidad en la entidad. Sin embargo, la aplicación de esta normativa enfrenta desafíos, y las autoridades aún no garantizan su cumplimiento efectivo.
A nivel nacional, Chiapas lidera el consumo de Coca-Cola, posicionándose como el mayor consumidor mundial de esta bebida. No obstante, Oaxaca también muestra un consumo elevado de refrescos, contribuyendo a las preocupaciones de salud pública relacionadas con la obesidad y la diabetes en la región.