Por: Luz Palacios
Este día se celebraron los 50 años del majestuoso Auditorio Guelaguetza, desde las 12 horas del día arrancaron las actividades culturales con una exposición fotográfica titulada «El inicio del esplendor»
A las 16:00 horas, se realizó el programa “Despierta Auditorio” a cargo de la Banda de Música de la Policía Estatal, la Marimba del Estado y el Coro de Voces del Instituto Margarita Aguilar Díaz, quienes interpretarán las tradicionales mañanitas.
El evento culminó con la gala de voces oaxaqueñas “Te regalo mi voz”, que contó con la participación de destacados artistas como Rosario López, Deily Zárate, Los Grandes del Sotavento y Chava Edain, además de diversos bailes de las diferentes regiones.
Este es un recinto lleno de historia un testimonio vivo de la identidad y cultura. El auditorio que se erige majestuoso en lo alto del Cerro del Fortín es el corazón palpitante de todas las tradiciones de Oaxaca, un faro de unidad y orgullo para las y los oaxaqueños.
En su participación la Secretaria de Turismo Saymi Pineda dijo que hace más de 90 año en 1932, nació la semilla de lo que hoy se conoce como la máxima fiesta de las y los oaxaqueños, La Guelaguetza, esto se realizó por el 4to centenario de la elevación de Oaxaca al rango de ciudad, con ello se erigió la primera estructura, llamada entonces la Rotonda de las Azucena.
Agregó que está obra fue testigo del inicio de una tradición que año con año congrega a las comunidades de las 16 cultura y de los pueblos afro mexicanos, desde las ocho regiones del estado para compartir sus danzas colores y esencia.
Asimismo, destacó que el actual auditorio Guelaguetza conserva esa mística del diseño inspirado en los antiguos teatros griegos y romanos, un homenaje a la armonía entre el hombre y la naturaleza.
“Aquí la cantera verde símbolo de nuestra tierra se fusiona con el cielo para albergar a mas de 11 mil almas que desde estas galerías disfrutan de un espectáculo, que reafirma nuestra identidad, desde este espacio con la imponente vista de la ciudad y los valles como telón de fondo, Oaxaca nos recuerda quienes somos y más que una festividad este es un acto cultural en su sentido más noble, una declaración de unidad, solidaridad y comunión”, concluyó.