La mañana de este miércoles, la Alameda de León fue escenario de una imagen que generó indignación entre ciudadanos y visitantes: un ciudadano con un mazo en mano golpeando el piso de cantera en el atrio de la Catedral. La escena levantó duras críticas sobre la acción comedia en este emblemático espacio, pues aunque se ha anunciado inversión para su renovación, la destrucción de su piso histórico preocupa a quienes consideran que las intervenciones de este tipo podrían estar dañando el patrimonio de la ciudad.
Las imágenes del acto rápidamente circularon en redes sociales, donde usuarios cuestionaron si realmente se trata de una restauración o si se está permitiendo la afectación de un espacio que forma parte del corazón de Oaxaca. «¿De qué sirve la supuesta inversión si están destruyendo lo que deberían preservar?», comentó un internauta, reflejando la inconformidad de muchos.
La exigencia ciudadana es clara: alguien debe dar la cara y garantizar que el patrimonio oaxaqueño no sea víctima de decisiones precipitadas.