Esta semana, Mario Delgado, presidente nacional de Morena, anunció el inicio de los preparativos internos para la renovación de la dirigencia del partido. En medio de la incertidumbre sobre el método a utilizar, Delgado señaló que se considerarán opciones como encuestas, congresos nacionales o una combinación de ambas. Subrayó la importancia de decisiones conjuntas con el Comité Ejecutivo Nacional y el presidente del Consejo Nacional, Alfonso Durazo, para asegurar un proceso transparente y democrático que respete la voz de la militancia y del pueblo, principios fundamentales para Morena.
Además, durante su visita a la casa de transición de Claudia Sheinbaum, quien será la próxima presidenta, Delgado mencionó que hasta el momento solo Luisa María Alcalde ha expresado públicamente su interés por liderar el partido a partir de octubre. Anticipó que con la apertura de la convocatoria se conocerán más aspirantes, reflejando así la dinámica participativa que caracteriza a Morena en la toma de decisiones internas. Mario Delgado dejará su cargo actual para asumir como secretario de Educación Pública, asegurando que los recientes cuestionamientos de grupos como la CNTE no reflejan posicionamientos oficiales, mientras se enfoca en futuros temas de trabajo con la nueva administración.