El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, anunció la imposición de un arancel del 27 por ciento a las importaciones provenientes de México. De acuerdo con el mandatario, esta medida tiene como objetivo promover un trato equitativo para las empresas ecuatorianas y fomentar la industria nacional. Noboa expresó su disposición a firmar un Tratado de Libre Comercio con México, pero enfatizó que, hasta que dicho acuerdo se concrete, el arancel será aplicado.
El mandatario ecuatoriano manifestó que su país está abierto a la integración comercial, pero no tolerará situaciones de abuso en el intercambio actual. Aunque no proporcionó detalles específicos sobre los abusos mencionados, esta decisión se produce en un contexto de tensiones diplomáticas entre ambas naciones. El año anterior, Ecuador y México rompieron relaciones diplomáticas después de que Noboa ordenara un allanamiento en la embajada mexicana para arrestar al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, quien cuenta con dos condenas por corrupción.
La imposición del arancel del 27 por ciento busca equilibrar la balanza comercial y proteger a las empresas locales frente a lo que el gobierno ecuatoriano considera prácticas comerciales desleales. Noboa reiteró su interés en fortalecer los lazos comerciales con México mediante un acuerdo que beneficie a ambas partes, pero subrayó que, mientras no se alcance dicho tratado, se mantendrá la nueva tarifa arancelaria.
Hasta el momento, el gobierno mexicano no ha emitido una respuesta oficial ante la medida adoptada por Ecuador. Esta situación añade una nueva dimensión a las relaciones comerciales en la región y podría influir en futuras negociaciones entre ambos países.