En un contexto de creciente tensión entre México y Estados Unidos, Ricardo Anaya ha lanzado fuertes críticas al gobierno encabezado por Claudia Sheinbaum, a la par que presentó un conjunto de propuestas para afrontar lo que considera la mayor crisis bilateral en un siglo. El senador panista calificó como ingenuas las respuestas de la administración actual y exigió medidas con visión de Estado.
Anaya señaló que minimizar los posibles impactos de los aranceles y las deportaciones masivas refleja una falta de estrategia. Responder con tarifas a las medidas estadounidenses, explicó, sería desproporcionadamente perjudicial para la economía mexicana, pues mientras las exportaciones representan un tercio del Producto Interno Bruto de México, para Estados Unidos constituyen solo el 7%. Asimismo, cuestionó las comparaciones entre las deportaciones actuales y las realizadas en administraciones previas, advirtiendo que las políticas actuales podrían desencadenar una crisis humanitaria al separar familias durante redadas en Estados Unidos.
En cuanto a sus propuestas, el panista planteó tres puntos clave: primero, la implementación de un programa histórico de visas y permisos de trabajo para migrantes mexicanos; segundo, la negociación de un tratado bilateral de seguridad para combatir al crimen organizado, abandonando la política de «abrazos, no balazos»; y tercero, la creación de un fondo de emergencia que permita a estados y municipios atender de manera efectiva a los deportados.
Anaya enfatizó que estas medidas buscan no solo proteger los intereses nacionales, sino también garantizar un manejo responsable y humano de la crisis, evitando caer en provocaciones como debates estériles sobre el nombre del Golfo de México. Finalmente, llamó al gobierno a actuar con altura de miras y firmeza, cerrando filas en favor de los mexicanos afectados por las políticas de Donald Trump.