La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha publicado un estudio en su Revista del Consumidor de marzo de 2025, en el que analiza la calidad y rendimiento de diversas marcas de pilas alcalinas y recargables disponibles en el mercado mexicano. El objetivo principal de este análisis es proporcionar a los consumidores información precisa que les permita tomar decisiones informadas al momento de adquirir estos productos.
En el estudio, se evaluaron cuatro marcas reconocidas: Duracell, Energizer, Radioshack y Steren, en sus versiones AA alcalinas y recargables. Las pruebas consistieron en medir la duración de las baterías mediante ciclos de descarga que simulan el uso en dispositivos de alto consumo, como juguetes motorizados. Los resultados revelaron que las pilas alcalinas de Duracell registraron una duración promedio de 6 horas y 8 minutos, mientras que sus versiones recargables alcanzaron 6 horas y 5 minutos. Por su parte, las alcalinas de Energizer ofrecieron un rendimiento de 6 horas y 4 minutos, y sus recargables, 5 horas y 40 minutos. Las baterías de Radioshack presentaron duraciones de 5 horas y 52 minutos en su versión alcalina y 5 horas y 50 minutos en la recargable. Finalmente, las pilas de Steren mostraron un desempeño de 5 horas y 35 minutos para las alcalinas y 5 horas y 16 minutos para las recargables.
Además de la duración, Profeco evaluó el etiquetado de estos productos para verificar que la información proporcionada al consumidor sea clara y veraz. Es importante destacar que, aunque las pilas alcalinas mostraron una mayor duración en las pruebas, son de un solo uso y deben desecharse después de agotarse. En contraste, las pilas recargables pueden reutilizarse múltiples veces, lo que representa una opción más económica y ecológica a largo plazo. La elección entre una u otra depende del tipo de dispositivo y la frecuencia de uso; por ejemplo, para aparatos de bajo consumo como relojes de pared, las alcalinas son adecuadas, mientras que para dispositivos de alto consumo, como juguetes electrónicos, las recargables son más convenientes.
Finalmente, Profeco hace hincapié en la correcta disposición de las baterías una vez que han llegado al final de su vida útil, ya que contienen metales pesados que pueden contaminar el suelo y el agua. Se recomienda buscar contenedores especiales para su recolección y reciclaje adecuado, contribuyendo así a la protección del medio ambiente.