La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) informó que ha ordenado el retiro del mercado mexicano de la «cerveza sin alcohol» en el país, destacando que en realidad no existe una categoría legal para esta. Según la normativa vigente, los productos etiquetados como «cerveza» deben contener un mínimo de 2% de alcohol. Las bebidas que no alcanzan este porcentaje deben ser clasificadas como «bebidas no alcohólicas».
El estudio, publicado este mes en la Revista del Consumidor, reveló que el contenido alcohólico de una cerveza debe oscilar entre 2% y 20% de alcohol por volumen (Alc. Vol.). Por lo tanto, los productos con menos de 2% de alcohol no pueden utilizar la denominación “cerveza” y deben ser etiquetados como bebidas no alcohólicas. Esta normativa choca con la manera en que algunas bebidas con 0,5% de alcohol se comercializan como “cervezas sin alcohol”.
La NOM-199-SCFI-2017, que establece las especificaciones para bebidas alcohólicas, define a la cerveza como una bebida fermentada hecha con malta, lúpulo, levadura y agua potable. Se permite la adición de infusiones de cereales, leguminosas, raíces o materia prima vegetal que contenga fécula, carbohidratos de origen vegetal que se puedan fraccionar mediante hidrólisis y azúcares, además de lúpulos o sucedáneos.
En este contexto, la Profeco identificó que solo una de las siete marcas analizadas de bebidas no alcohólicas, la Mahou 0,0 tostada de origen español, no cumple con la normativa al etiquetarse como «cerveza».
La Profeco ha retirado dos lotes de este producto del mercado y ha iniciado el proceso de contacto con el proveedor para aclarar la situación. Los productos que no cumplan con las Normas Oficiales Mexicanas pueden estar sujetos a medidas precautorias, y sus proveedores podrían enfrentar procedimientos por infracciones a la ley.
Aunque las bebidas sin alcohol utilizan ingredientes similares a los de la cerveza, su elaboración difiere en el proceso. Entre los métodos utilizados se encuentran:
- Destilación al vacío: Recupera el etanol del vapor generado a temperaturas menores a las de ebullición.
- Ósmosis inversa: Separa el etanol mediante una membrana impermeable.
- Utilización de levaduras: Que producen niveles muy bajos de etanol durante la elaboración.