El Pachuca enfrenta un desafío logístico y de salud para sus jugadores al estar programado para disputar tres partidos en un lapso de seis días. Inicialmente, jugarán las Semifinales de Concachampions ante el América el martes a las 19:15 horas, seguido por el enfrentamiento en el Play-In contra Pumas el jueves a las 21:15 horas. Si perdieran este último encuentro, se verían obligados a volver a la cancha el domingo contra el ganador de la llave entre Necaxa y Querétaro.
La directiva del Pachuca intentó reprogramar el partido contra Pumas para el viernes, pero la falta de espacio en el calendario lo impidió, generando preocupaciones sobre la salud de los jugadores ante la carga de partidos de alta intensidad en un corto período de tiempo.
La situación se complica debido a la posibilidad de que los encuentros se extiendan a tiempos extra y penaltis, lo que podría violar el reglamento de la Liga MX sobre el intervalo mínimo de 48 horas entre partidos. Aunque el reglamento no contempla explícitamente esta situación para los juegos de fase final, la programación tan ajustada representa un riesgo para la integridad física y el rendimiento de los jugadores del Pachuca señaló Rubens L.Valenzuela.
«Imposible jugar martes, jueves y domingo. Como profesionales y científicos del deporte no deberíamos arriesgar a nuestros jugadores desde su salud. No tenemos la culpa del calendario . No nos puede un calendario quitarnos esa posibilidad, para eso están nuestros rivales.» publicó en su cuenta de X.