La presidenta Claudia Sheinbaum dejó claro que México no aceptará una postura de sumisión ante la imposición de aranceles por parte de Estados Unidos. Ante el escenario de nuevas barreras comerciales, señaló que el país buscará fortalecer lazos con Canadá y otras naciones para reducir el impacto económico. Afirmó que esta es una etapa crucial y que la economía mexicana se mantiene estable, gracias a la resiliencia del pueblo y la solidez del mercado interno.
En este contexto, Sheinbaum destacó que, aunque el peso sufrió una depreciación tras la entrada en vigor de los aranceles, la caída no fue significativa, manteniéndose por debajo de los 21 pesos por dólar. Comparó la situación con periodos anteriores, como la administración de Enrique Peña Nieto y la pandemia, cuando la moneda alcanzó los 25 pesos por dólar. Aseguró que, aunque estas medidas afectan a México, en el corto plazo perjudican más a la economía estadounidense, pues empresas y consumidores en ese país enfrentarán un aumento inmediato en los costos de bienes importados, particularmente en sectores como el automotriz y el comercio minorista.
Sheinbaum subrayó que la interdependencia comercial entre ambos países hace que los aranceles generen resistencia incluso dentro de Estados Unidos. Mencionó que algunos gobernadores y senadores han expresado su desacuerdo con las medidas, ya que su impacto podría repercutir negativamente en diversas industrias. Con ello, reafirmó que México tomará decisiones estratégicas para minimizar los efectos en su economía, sin ceder a presiones externas.