El Banco de México (Banxico) ha revisado a la baja su pronóstico de crecimiento económico para 2025, reduciéndolo del 1.2 por ciento al 0.6 por ciento. Esta decisión se atribuye a la incertidumbre generada por las políticas comerciales de la nueva administración estadounidense, encabezada por el presidente Donald Trump, que podrían afectar significativamente la economía mexicana. La gobernadora de Banxico, Victoria Rodríguez Ceja, señaló que esta incertidumbre ha provocado una disminución en el consumo y la inversión privada, especialmente en el primer semestre del año.
Además del entorno internacional adverso, Banxico ha identificado otros factores que podrían limitar el crecimiento económico de México. Entre ellos se encuentran el enfriamiento de la economía estadounidense, posibles episodios de volatilidad en los mercados financieros y una reducción en el gasto público nacional. A pesar de estos desafíos, la institución proyecta una recuperación moderada para 2026, con un crecimiento estimado del 1.8 por ciento.
En cuanto a la inflación, Banxico ha ajustado sus expectativas, anticipando que la tasa anual se ubicará en 3.3 por ciento para finales de 2025, por encima del 3 por ciento previsto anteriormente. Para 2026, se espera que la inflación alcance el objetivo del 3 por ciento. En respuesta a la desaceleración económica y con el objetivo de preservar el poder adquisitivo de la moneda nacional, la Junta de Gobierno de Banxico decidió reducir la tasa de interés de referencia en 50 puntos base, situándola en 9.5 por ciento.