Con el propósito de salvaguardar la salud de la población ante posibles riesgos sanitarios tras el paso de la tormenta tropical John, el Consejo Estatal de Protección Civil, en coordinación con los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), ha desplegado un equipo especializado para atender las áreas afectadas en la región de la Costa.
Personal de la Jurisdicción Sanitaria 4 Costa recorre albergues temporales instalados en los municipios de Santiago Pinotepa Nacional, Santa María Colotepec, San Pedro Mixtepec, Santa María Huatulco y San Pedro Pochutla. La supervisión incluye la verificación de las fuentes de abastecimiento de agua, el monitoreo de cloro residual, y la aplicación de hipoclorito de calcio para garantizar la potabilización del agua.
Como parte de las acciones preventivas, el Comando Operativo se mantiene en sesión permanente en la región, mientras que tres brigadas especializadas de la Unidad de Inteligencia para Emergencias en Salud (UIES) realizan la búsqueda de casos de enfermedades, identifican riesgos sanitarios y promueven medidas de salud.
Las autoridades sanitarias han emitido recomendaciones para la población afectada, enfocándose en la prevención de enfermedades relacionadas con inundaciones. Se insta a reforzar las medidas de higiene, como el lavado frecuente de manos con agua clorada, especialmente antes de preparar alimentos, después de usar el baño, tras toser o estornudar y al atender a personas enfermas.
Asimismo, se pide manejar correctamente los residuos en los hogares, separándolos adecuadamente para evitar la acumulación de basura. Los desechos deben ser colocados en recipientes con tapa o en bolsas cerradas, lejos de alimentos y fuentes de agua potable, a fin de prevenir la proliferación de mosquitos, roedores y otras plagas que puedan generar problemas de salud.
En caso de haber estado expuesto a agua contaminada, se recomienda cambiar de ropa de inmediato, y al toser o estornudar, cubrirse con un pañuelo desechable o con el codo. También es crucial evitar consumir agua o alimentos que hayan estado en contacto con aguas de la inundación, utilizando únicamente agua embotellada, hervida o desinfectada con plata coloidal para beber, cocinar, lavar trastes y cepillarse los dientes.
Después de una inundación, se recomienda ventilar los espacios y esperar a que se sequen antes de proceder con la limpieza. Para este proceso, es importante usar botas de plástico, guantes y cubrebocas, y desinfectar adecuadamente muebles, ropa y utensilios que hayan estado en contacto con agua contaminada.
Finalmente, se hace un llamado a la población para que, ante cualquier síntoma de enfermedad, acudan a la unidad de salud más cercana. A las personas con enfermedades crónicas se les recuerda no descuidar su tratamiento en medio de esta emergencia.