El gobernador Rubén Rocha Moya anunció la cancelación de la celebración pública del Grito de Independencia en Sinaloa, programada para el 15 de septiembre, debido a preocupaciones de seguridad. La ceremonia se realizará únicamente con autoridades gubernamentales y sin público, para priorizar la seguridad de la población, especialmente de los niños y jóvenes.
La decisión surge en respuesta a una reciente ola de violencia en la región, que ha incluido balaceras, bloqueos y secuestros. Además, se suspenden las clases en todos los niveles educativos durante el 12 y 13 de septiembre como medida de precaución.
Por su parte, el municipio de Cadereyta Jiménez, Nuevo León, también decidió suspender los festejos del Grito de Independencia, convirtiéndose en el segundo municipio en tomar esta medida, después de Galeana.
La administración del alcalde panista Cosme Leal justificó la cancelación citando el ahorro de recursos para los trabajos de transición de gobierno y el pronóstico de lluvias que podría comprometer la seguridad de los asistentes. En un comunicado oficial, la administración explicó que los recursos que se habrían destinado a las festividades serán reorientados hacia áreas prioritarias para el cambio de gobierno y que las precipitaciones previstas para el 15 de septiembre incrementan los riesgos asociados con la realización del evento.