En medio de un ambiente colorido y lleno de fiesta, la explanada central del congreso local fue la sede de la presentación de la Danza de la aguja, de Santo Tomás Ocotepec, que recibió el reconocimiento como patrimonio cultural intangible o inmaterial del estado de Oaxaca.
Un nutrido grupo de bailarines, ataviado con prendas y máscaras típicas de la comunidad, dieron forma a una coreografía guiada por la música tradicional de la comunidad ubicada en la región de La Mixteca.
El reconocimiento a esta tradición histórica, cultural y artesanal, se da en el marco de las celebraciones por la Guelaguetza.