Integrantes de las brigadas de combate al fuego de la Comisión Estatal Forestal (COESFO), recordaron como el más complicado al incendio de San Lucas Quiaviní, el cual de acuerdo con datos oficiales de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), inició el 26 de febrero pasado y se declaró totalmente liquidado el 4 de marzo.
Además, el siniestro cobró la vida de 5 personas que se encontraban apoyando en las labores para sofocar las llamas.
El incendio, reportado el 26 de febrero, inició con fuego al interior de un bosque de encino en los predios de Cerro Quiaviní y San Pablo Güila, además de que se extendió hasta alcanzar inmediaciones del predio Piedra de Letra. Los trabajos fueron intensos y los esfuerzos por extinguir las llamas, recuerdan los combatientes, parecían no ser suficientes.
Cabe señalar que, de acuerdo con cifras publicadas por la CONAFOR, en el combate al incendio de Quiaviní participaron un total de 2,227 elementos, aportados por la propia comisión, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Nacional y el gobierno estatal a través de protección civil; también se sumaron integrantes del municipio de San Lucas Quiaviní, voluntarios y dueños de terrenos aledaños.
