El domingo, las autoridades municipales de Tula informaron de este preocupante desarrollo al Gobierno Federal y al Gobierno del estado, solicitando su intervención para investigar las causas y tomar acciones preventivas. Las grietas, que afectan a diversas áreas residenciales y agrícolas, han alterado la vida diaria de los pobladores, algunos de los cuales han tenido que evacuar sus hogares por precaución.
Existen diversas teorías sobre el origen de estas grietas. Algunas versiones señalan que podrían ser consecuencia de la fracturación hidráulica, también conocida como fracking, realizada por PEMEX en la región. Esta técnica de extracción de petróleo y gas ha sido objeto de controversia debido a sus posibles impactos ambientales, incluyendo la inducción de terremotos y la alteración de las estructuras del subsuelo.
Por otro lado, algunos expertos y residentes sugieren que las recientes e intensas lluvias podrían haber debilitado el suelo, provocando el colapso de ciertas áreas y la aparición de las grietas. Las lluvias han sido inusualmente fuertes en las últimas semanas, lo que podría haber saturado el terreno y generado movimientos en el subsuelo.
Ante esta situación, se han desplegado equipos de geólogos y especialistas en desastres naturales para evaluar el alcance del daño y determinar las causas exactas de las grietas. Las autoridades han recomendado a la población mantenerse informada a través de los canales oficiales y seguir las indicaciones de seguridad emitidas por los expertos.
El fenómeno ocurre en un momento crítico, ya que la región se prepara para enfrentar la temporada de huracanes y otros eventos meteorológicos extremos, lo que añade una capa adicional de complejidad a la gestión de la crisis. La coordinación entre los distintos niveles de gobierno y la comunidad será fundamental para mitigar los riesgos y garantizar la seguridad de los habitantes de Tula.