Carolina Espina
Actualmente, Oaxaca no cuenta de manera particular con ningún precepto legal que regule los alojamientos temporales por aplicaciones tecnológicas, la única regulación que existe es el Protocolo de Colaboración entre el Gobierno del Estado y Airbnb, establecida en el 2022.
En México, la regulación del hospedaje a través de plataformas digitales se dio recientemente por iniciativa del Sistema de Administración Tributaria (SAT), en el que se estableció que los servicios de hospedaje a través de plataformas tecnológicas también deben estar sujetos al pago del Impuesto Sobre la Renta (ISR), del 4%.
De acuerdo a Gilberto Estrada Flores, presidente de Cámara Nacional de Vivienda (Canadevi) delegación Oaxaca, en la entidad ha aumentado de manera considerable la demanda de vivienda, sobre todo en el rubro de renta, porque por adquisición es cada vez más difícil.
“Como han aumentado mucho la tasa de interés, tanto del crédito puente que nos dan para construir como para colocar la vivienda, los precios de cimentación están a alza, sobre todo por los materiales de construcción, muchos de los cuales han tenido un incremento del 100 por ciento como el cemento o la varilla”.
Comentó que tras la pandemia vivida hace algunos años, el tren de vivienda se vino hacia abajo, situación que se vio reflejada hasta en los créditos del Infonavit, que tuvo que abrir más opciones como el crediterrero, para adquirir un lote y ya no una casa, así como para remodelación o ampliación.
Dijo que, ante esta situación, se han incentivado de sobremanera las posibilidades de renta, porque ya no alcanza. “Había personas que te podían comprar casas de tres millones, de dos y quienes podían comprar una opción de un millón de pesos han optado por rentar, ya no hay casas de ese precio”.
Estrada Flores sostuvo que la demanda de vivienda siempre va a existir, pero todo es de acuerdo a la situación, ejemplo por el cual en estos momentos las rentas de casas se han disparado en un 40 por ciento y seguirán aumentado ante la imposibilidad de compra.
“En el centro las rentas de viviendas y para negocios es demasiado cara, las cuales fluctúan entre los 30 mil hasta los 300 mil pesos al mes, la gentrificación trajo esa situación, lo mismo que el Airbnb, el cual vino a encarecer muchísimo las rentas, ya sea de manera permanente o diaria”.
Dijo que el fenómeno de la gentrificación será difícil de detener, poque es algo que se da automáticamente por el tipo de cambio. “Si una persona se jubila con 3 mil dólares en EEUU, no vive con esa cantidad en su país, pero si llega a Oaxaca, aquí hasta le sobra, por eso es que muchos salen de sus países para establecerse”.
Sin embargo, sostuvo que esta situación también le afecta a los oaxaqueños, ya que muchos comercios estipulan sus precios de acuerdo a nivel de ese tipo de clientes, dejando en desventaja a la población en general que no puede acceder a muchos lugares, por lo que es necesario establecer dinámicas para equilibrar esta situación.
Y es que según datos del CESOP, desde hace varios años, Oaxaca enfrenta el problema de la gentrificación turística, surgido por la aparición de aplicaciones tecnológicas que facilitan la renta de espacios para alojamiento de turistas aumentando con ello los precios del suelo y renta, así como la migración.
En un análisis realizado en el 2022, señala que en la capital existían mil 685 inmigrantes extranjeros residentes. Cuenta con 8 mil 400 alquileres activos en Airbnb, mil 455 corresponden a la renta de casas completas, mil 479 son habitaciones y 21 habitaciones compartidas, entre otros.
Las áreas de la ciudad con mayor número de alojamientos en renta en Airbnb son Jalatlaco, Xochimilco, Centro Histórico, San Felipe del Agua, Colonia Reforma, Ex-Marquezado y Santa Rosa Panzacola.
En la periferia de la ciudad, zonas que no han sido gentrificadas, las rentas oscilan entre los 3 mil y 10 mil pesos, mientras la renta de habitaciones en el Centro va de los mil 200 a los 14 mil pesos.