El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó las especulaciones sobre su supuesta injerencia en la conformación del nuevo gabinete de la presidenta electa Claudia Sheinbaum. Durante la conferencia mañanera, el mandatario afirmó contundentemente: «¡No estoy metiéndome en nada!».
López Obrador reiteró el gran respeto que le tiene a Sheinbaum y aseguró que desaparecerá de la vida pública al concluir su mandato. «No dejaré que me tomen fotografías e, incluso, no viajaré en aviones comerciales», expresó.
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El presidente también mencionó sus planes personales después de entregar la banda presidencial. «Voy a ver cómo le hago para trasladarme porque voy a estar viniendo para ver a mi compañera Beatriz Gutiérrez Müller, que la amo mucho, me ha ayudado», comentó.
López Obrador reconoció las dificultades que enfrentan quienes se dedican al servicio público y agradeció el apoyo de su esposa durante su gestión. «Nada más con aguantarme, ¡ya! Imagínense con todas las pequeñas presiones que se enfrentan en este noble oficio», expresó.
La transición de gobierno entre López Obrador y Sheinbaum se llevará a cabo de manera ordenada y sin interferencias, según las declaraciones del mandatario saliente. Sheinbaum tendrá plena libertad para conformar su equipo de trabajo y definir las prioridades de su administración.