La doctora en física y divulgadora científica Mar Gómez explicó cuáles son las implicaciones que tuvo en la Tierra la llamarada solar más potente desde hace una década, que tuvo lugar el pasado 14 de mayo, según la NASA.
“La NASA ha registrado la llamarada solar más potente desde hace casi una década. El Sol no para en su actividad y la explosión solar más fuerte de este ciclo acaba de lanzarse desde el mismo grupo de manchas solares que generó las auroras de la semana pasada”, explicó la especialista.
Sostuvo que la enorme mancha solar AR3664, responsable de las auroras generadas en días pasados, envió una potente llamarada solar al espacio. La más intensa de todo el ciclo solar y la más intensa desde 2017.
“Y es que la mancha solar, AR3664, ha estado enviando llamaradas solares durante días. El 10 de mayo emitió una llamarada solar de clase X5.8, y en las últimas 12 horas, un trío de bengalas de clase X se ha producido. La más potente ha sido X8.7 y se produjo ayer”, aseveró.
Gómez explicó que las llamaradas solares se clasifican en función de letras y números, de acuerdo con su tamaño, siendo las de clase X las más poderosas, además, dentro de cada una de estas clases, los números del 1 al 10 denotan su fuerza relativa.
“El sol no ha escupido ninguna llamarada más fuerte que X8.7 desde septiembre de 2017, cuando emitió una llamarada X11.8 y X13.3 a pocos días, la una de la otra”, explicó.
Sostuvo que se pudo haber esperado la aparición de potentes auroras boreales, pero debido a la ubicación de la llamarada posiblemente no tenga impacto de estos fenómenos en la Tierra.
“Sin embargo, con la ubicación actual de AR3664, hay una conexión entre esa región del sol y la Tierra que está causando apagones de radio. Los informes han estado llegando de toda Australia y Asia Oriental de frecuencias de 20 MHz o inferiores experimentando un apagón casi completo”, especificó.
Explicó que a medida que la mancha solar gira sobre el borde occidental del sol, entra en un lugar que la une magnéticamente a la Tierra, por lo que una aceleración de alta velocidad de partículas cargadas desde AR3664 salta a esta autopista espacial, llamada la espiral Parker.
“Por poner una similitud, la espiral podría ser como un tobogán de un parque acuático por el cual las partículas cargadas del sol se envían a gran velocidad hasta llegar hasta su ubicación (la piscina) y en nuestro caso la Tierra. Una carretera con destino directo a la Tierra”, añadió.
A medida que las partículas llegan al campo magnético de la Tierra, los protones se agrupan y se dirigen hacia los polos donde reaccionan con la atmósfera y comienzan a causar problemas para las transmisiones de señal de radio de onda corta.
Mar Gómez especificó que todos estos fenómenos solares extremos (llamaradas solares, manchas solares y CME) se vuelven más comunes durante el pico del ciclo de actividad de 11 años del sol, conocido como máximo solar.
“El ciclo actual, el ciclo solar 25, comenzó en 2019, y los científicos sospechan que el sol puede entrar pronto en su fase máxima solar, si aún no lo ha hecho”, explicó.
Sostuvo que solo después de que el máximo termine, y la actividad solar se pare de nuevo, los científicos sabrán con certeza cuándo alcanzará su punto máximo o si ya se encuentra en él.
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